lunes, 22 de febrero de 2010

DIÁLOGO INTERNO: ABANDONAR EL APEGO.

Nunca he sido muy amiga de los autoengaños. Ni de los ajenos, y mucho menos de los propios. Pero eso no quiere decir que no me engañe a mí misma de vez en cuando como hace cualquier hijo de vecino. Lo que sí puedo hacer al respecto es andar con ese "autoengaño" el menor tiempo posible. ¿Y cómo se hace eso? Jugando al Trivial (uno un poco especial, eso sí) Este "Trivial de tomar conciencia" es un juego donde yo pregunto y yo misma respondo. Bien mirado es un juego que no admite derrota puesto que sólo hay un participante: yo, y soy precisamente yo quien conoce todas las preguntas y también todas las respuestas. Sólo hay un requisito: no se admiten trampas. Sólo se gana si soy "terriblemente" honesta. El primer paso: coger una tarjeta al azar y hacer una pregunta:
Por ejemplo: -¿Por qué actúo de una manera cuando en realidad yo pienso de otra?
¡Cuidado! Pregunta trampa. La misma pregunta en sí está mal hecha, así que cojemos otra tarjeta y reformulamos:
-¿Por qué actúo de una determinada manera cuando sé que sería más sano para mí actuar de otra?( Hay un ligero matiz). Ahora sí, pulsamos el reloj: tic-tac, tic-tac...
- Porque hacerse responsable de uno mismo da vértigo y por eso es más fácil, más cómodo, seguir siempre por el mismo camino, aunque eso implique cometer los mismos errores.
(Uy, esta partida se pone interesante, se nota que este Trivial lo inventé yo, ¿eh?) Sigo.
-¿Cuáles son esos errores que me empeño en repetir? (Puesto que lo primero es identificar qué pasos estamos dando mal.) O un poco más fácil (nos damos un comodín) ¿De qué conductas acompaño los errores que ESTOY ELIGIENDO repetir?
- La principal conducta: la toma impulsiva, precipitada, de determinadas decisiones poniendo como excusa (porque es una excusa) que actúo de corazón. (Aclaro:muchas veces actuamos de corazón y eso es muy válido, pero cuando se actúa "de corazón" y para eso acabo poniéndome una navaja al cuello, puedo perder la cabeza y eso ya no es tan bueno...)
-¿Y qué signfica todo esto? Actuar impulsivamente me lleva a construir castillos en el aire, valerme de la ilusión para ignorar la realidad. Y la realidad es que aún no he aprendido. Vivir una fantasía no es más que vivir con apego. Prefiero creer que las cosas pueden ser de una manera y que si me empeño mucho, mucho, lo conseguiré. Agarrarme a una idea, a un sentimiento (que puede ser engañoso porque quizás lo que yo interpreto como un sentimiento no sea más que el fruto de una carencia), agarrarme a sujeto, persona, animal o cosa que me aporte todo aquello que aún yo misma no he sabido proporcionarme, porque además, sé que para aprender tengo que hacerlo yo sola. ¡Y cuánto miedo da la soledad! (porque hubo un tiempo, cuando éramos muy, muy chiquititos,  que nuestra supervivencia dependía de otro).
Así que en el fondo de toda esta cuestión sólo hay apego, crear una dependencia de cualquier circunstancia para darle más alas a mi castillo en el aire cuando sé que lo que hay que hacer es construirle unos cimientos en tierra firme.
-¿Y ahora qué puedo hacer?
Ya me he dado cuenta, otra vez de lo mismo (no es la primera vez que le doy la patada a un apego), una vez más, aquí esta la experiencia que siempre nos allana un poquito el camino. Retomo el camino por el que un día comencé a transitar. El primer paso de aquel camino tenía un propósito firme: no más dependencias. Me hago cargo de identificar a qué me estoy agarrando. Lo veo. Soy conciente. Y esa que está con el puño apretado no es la persona que quiero ser, pero no me regaño por ello, sólo me digo a mí misma con dulzura: suelta, no necesitas esto, si quieres coger algo, coge mi otra mano. Sin reproches. Con miedo todavía, pero sé que el valiente no es el que no tiene miedo, sino el que camina junto a él. Aprender a soltar. Ya lo escribí una vez. Mi gran lección por aprender pero que desde este mismo momento ya estoy consiguiendo. Ahora ya puedo guardar el Trivial hasta la próxima partida.

8 comentarios:

DEMOFILA dijo...

Bonito juego, amiga mía, si te lo has inventado tí, ¿cómo no vas a ganarlo?.
No sé si te contestaré a todas las preguntas que haces en tu trivial, pero intentaré contestar algunas.
A la pregunta de ser resposable de uno mismo, yo creo que no siempre hay que seguir el mismo camino, la vida cambia y los caminos cambian, la vida va cambiando al mismo tiempo que la persona, que con la experiencia adquirida en ella, no es la misma siempre.
Sobre la impulsividad, no soy nada impusiva, soy más bien cerebral, en mí no manda el corazón, manda la mente, y la soledad no me asusta en absoluto, algún día de la vida, aunque tengas pareja, se queda sola una parte de la pareja, eso es la soledad.
Sobre el miedo, te puedo decir que practicamente no le tengo miedo a nada, siempre he caminado acompañada de él, y así he conseguido defenderme yo sola y no depender de nadie.
Bueno, guapa, te espero para echar la próxima partida, espero que lo hayas pasado bien con ésta.

lara dijo...

Me parece que tu sabes mucho de esto. No sólo porque sean tus vivencias, sino pq... eso que sabes mucho.
Un beso de colores

Amiscamaradas dijo...

Hola chic@s!! Cómo me gustan vuestras visitas! Demófila, qué razón tienes en eso de que la vida va cambiando y nosotros con ella! Pero sí hay una cosa que quizás conviene mantener constante a pesar de los cambios: la responsabilidad sobre uno mismo, especialmente en esas épocas en las que uno se descuida un poco más o tiende a ser más vulnerable. ¡Ahí, en esos momentos, es cuando hay que sacar el Trivial y ponernos al día!

Me alegra que no sientas miedo por casi nada, porque gran parte del bienestar que podemos sentir en nuestra vida viene de no tener miedo de ser uno mismo.Y yo sé que tú eres muy auténtica, así que tienes mucho ganado y mucho vivido (así que no juego al Trivial contigo que me ganas, jajaja!) Besotes para ti.

Amiscamaradas dijo...

Lara, jajaja, ¡qué gracioso tu comentario!. Yo no creo saber mucho, más bien sé que tengo mucho por aprender. (Y eso me encanta,porque soy una curiosa nata) Dicen por ahí que uno escribe sobre lo que desea aprender, y el tema de los apegos es más farragoso de lo que uno se piensa, porque a veces nos apegamos con mucha sutileza, casi imperceptiblemente,"como quien no quiere la cosa" y por eso y para eso tengo mi Trivial, que lo voy a patentar!!! jajaja Besiños multicolores.

Anónimo dijo...

Lo peor de todo es que sabes muchísimo. Eres mi gran sabia. Y sí, podría estar tardes leyendo las palabras que transitas por tu cabeza y conciencia.
Uno se da cuenta que debe ser consciente de todo. Te admiro!
Tu eosino-piojito.
Todo está dentro del laberinto.... sigamos en él!

Amiscamaradas dijo...

Piojito!! jajajaja... ¡Que me sacas los colores! Yo sí que te admiro. La primera vez que te vi sobre el escenario, te conocí como actor y me enamoré de tu talento, y cuando te conocí como persona me enamoré de tu luz y te convertí en mi mejor amigo. A mí me encanta pasar horas hablando contigo y perdiéndonos en nuestros laberintos que hacen más mágica la vida. (Por cierto, dentro de poco publicaré lo tuyo, que te quiero hacer un homenaje como dios manda, y esta vez sin tráfico de myolastán!, jajajaja)

DEMOFILA dijo...

¿Pero que juergas os traéis?, creía que eras más seria.
Cuando me contestas a mí, pareces otra persona, dando consejos y discutiendo conmigo todo lo que te escribo en mis comentarios, y sobre todo, llevándome la contraria, guapa.
Espero que me digas quien es el piojito que te has echado, me gustaría saber quien es, para competir contigo, creo que podría ganarte.
Ya sabes el genío que tengo, así que contestáme.
Un beso,espero tu respuesta, preciosa.

Amiscamaradas dijo...

Jajajajja... ¡Que yo no me he echado ningún piojito! A ver, Edu, cielo, si lees esto, explícale a mi queridísima Demófila cómo es nuestra "platónica" relación, jajajaja

Ahh! Se me ocurre una cosa que lo resume todo! Voy a publicar la escena de una película, que a mi piojito y a mí siempre nos emociona porque define muy bien nuestra amistad. Los actores son Julia Roberts y Rupert Everet. Yo siempre le llamo mi Rupert por esta peli.
(De paso, Edu, te lo dedico)

Ay Demófila, con eso comprenderás que ni tú ni yo podríamos conquistar al piojito, jajajaja

¿Y quién ha dicho que sea seria? Las apariencias engañan!
Te quiero, guapa. Y no te pierdas el vídeo que voy a poner. Es buenísimo.